Ciudad Victoria, Tamaulipas, 13 de octubre de 2025 — Lo que debía ser una obra de modernización para mejorar el acceso al ejido El Huizachal se ha convertido en un foco de desorden y abandono, debido a la falta de avances y control por parte de la empresa constructora D&SSA, responsable de los trabajos en la carretera Rumbo Nuevo.
Desde finales de septiembre, habitantes de la zona han denunciado públicamente los daños provocados por la obra, que ha dejado zanjas abiertas, montones de escombro, maquinaria sin resguardo y afectaciones económicas por la caída en el número de visitantes a los comedores rurales.
Agustín Barrón Luna, presidente de la Sociedad de Producción Rural de El Huizachal, señaló que los encargados de la obra no han ofrecido explicaciones ni han mostrado disposición para atender los reclamos de la comunidad. Aunque personal de la Comisión Federal de Electricidad acudió recientemente a revisar el tendido eléctrico, la situación general permanece sin cambios.
“Estamos preocupados por lo que pueda ocurrir con la llegada de más lluvias. Los encharcamientos y el deterioro del camino pueden empeorar si no hay una intervención urgente”, advirtió Barrón Luna.
Los ejidatarios exigen a la Secretaría de Obras Públicas del estado que intervenga de inmediato para resolver el abandono de los trabajos y evitar que los problemas se agraven. Mientras tanto, el paisaje de El Huizachal sigue marcado por la incertidumbre y las promesas incumplidas.